Grecia: Atenas y Crucero de 3 días
- Duración
- 6 días
- Tipo de circuito
- Circuito
Grecia es un país mágico, lleno de rincones con mucho encanto, con una cultura increíble, una historia interesante y unas tradiciones que te enamorarán y en este viaje vas a poder comprobarlo tú mismo. Atenas, la capital, es un ‘must’, primero porque será ahí donde aterrices y segundo, está repleta de monumentos que han perdurado durante siglos. En esta ciudad realizarás una completa visita panorámica en la que conocerás sus principales calles y plazas como la conocida Sintagma. La Acrópolis es la joya de la corona, el monumento que vigila la ciudad en lo alto de la colina, y este será otra de las visitas, junto al Arco de Adriano, el estadio olímpico, la Puerta de los Propileos y muchos lugares más que han marcado la historia de la civilización Occidental.
“La gastronomía griega es famosa en el mundo entero por ser sana y exquisita. Las hortalizas, legumbres y frutas son sus principales ingredientes, y sus aliños, el aceite de oliva virgen y su increíble yogur”
Tu aventura continúa en Grecia, pero es su paradisíacas islas. Las playas de aguas cristalinas, rodeadas de verdes olivos salvajes, solitarias ya que en este país hay tantas que ninguna se llega a llenar del todo, en definitiva, una experiencia sensorial única. En esta segunda parte vas a poder vivir esta experiencia no en una sola isla sino en tres: Mykonos, Santorini, Patmos y además, podrás conocer la costa turca en Kusadasi. Mykonos te dará una lección de belleza. Sus típicas fachadas blancas y azules, junto al mar Mediterráneo es la postal más típica. Navegarás hasta Patmos, en el mar Egeo muy cerca de Turquía, una pequeña isla con mucho que ofrecer. Pero esto aún continúa. La costa turca te espera y Kusadasi te da la bienvenida. Y como último destino qué mejor que Santorini, la isla por antonomasia, la foto más típica de las islas griegas, una maravilla para acabar este increíble viaje.
Vive experiencias únicas
¿Quieres conocer a las mujeres más bellas de Atenas? Pues sube hasta la Acrópolis y acércate al templo Erecteión. Ahí las encontrarás firmes, sujetando desde hace siglos el pórtico sur del Erecteión. Son las Cariátides, esas seis columnas de más de dos metros de altura con forma de doncella que se han convertido en uno de los símbolos de Atenas.
Se llaman así porque las mujeres que posaron como modelos procedían de Karyai (la actual Karyes), en Laconia. Eso sí, ten en cuenta que las que verás en el templo son copias, porque las originales –menos la que se llevó lord Elgin y que está en el Museo Británico de Londres- descansan en el Museo de la Acrópolis a salvo de la polución y el desgaste. Encontrarás el Erecteión, una obra maestra de la arquitectura jónica, en el lugar más sagrado de la Acrópolis porque, dicen, es el sitio donde Poseidón clavó el tridente en una roca. ¿Sabías que el templo, que debe su nombre a Erecteo, uno de los míticos reyes de Atenas, está construido en varios niveles para contrarrestar la irregularidad del suelo? ¿Y que a lo largo de la historia ha sido templo consagrado a Poseidón y Atenea o harén del comandante turco, entre otros usos?
¿Sabías que Karyai era famoso en la antigüedad por la belleza de sus mujeres y que, de hecho, es la tierra de donde procedía Helena, la bella hija de Zeus cuya huida con Paris provocó la Guerra de Troya?
Cuando llegues a Patmos, no te sorprendas si notas algo diferente, algo especial. Dicen que toda la isla está impregnada de un halo de espiritualidad, que aumenta a medida que te acerques a la aldea de Hora, un lugar mágico adonde cada año viajan miles de peregrinos para contemplar en persona el lugar donde San Juan Evangelista recibió el encargo divino de escribir el Apocalipsis.
Este bello lugar, donde se alza un impresionante monasterio bizantino, era el centro neurálgico de la isla. Ahora ya no goza de esta exclusiva, porque el puerto de Skala ha tomado las riendas, pero sigue siendo el lugar más famoso. Si tu visita coincide con una misa, tienes asegurado un recuerdo único. Y en todo caso, no puedes perderte la gruta donde supuestamente Dios instó a San Juan a escribir El Libro de las Revelaciones. Allí, por ejemplo, podrás ver la piedra que el santo usaba de almohada o la triple fisura en el techo por donde escuchó la palabra divina.
En Patmos sentirás un halo de espiritualidad por toda la isla, pero si quieres algo más terrenal, sólo tienes que darte una vuelta por el puerto de Skala, donde encontrarás bares, restaurantes, tiendas y mucho ambiente.
¿Ya has paseado por Fira pero necesitas saber más de Santorini? No lo dudes y acércate a Oia, porque este bellísimo pueblo te enseñará cuál es la esencia de una de las islas más bellas del Mediterráneo.
En esta bella aldea marinera, también llamada Pano Meria (el lugar de arriba), vas a hacer fotos a mansalva porque es difícil encontrar una panorámica tan espectacular. Por un lado, verás sus bellas casas color pastel que brotan aferradas a la roca del acantilado porque, de hecho, muchas de ellas están excavadas en cuevas. ¿Sabes que allí vivían los marineros de su potente flota comercial a finales del siglo XIX? Y si había marineros, obviamente la ciudad también acogía a los capitanes y comerciantes ricos, aunque éstos preferían vivir en la zona alta de la ciudad, donde aún hoy verás sus lujosas mansiones patricias. A su alrededor, encontrarás bellas iglesias y restos de épocas opulentas, como el mármol en varias calles y plazas.
No sólo es llegar a un destino, sino disfrutar del camino. Por eso, querido viajero, en tu trayecto desde Fira hasta el norte debes estar muy atento a los pequeños pueblos por los que pasarás. No te pierdas Firostefani, también asomado al espectacular acantilado, o Imerovigli, creado como un observatorio para vigilar la posible llegada de piratas.
Si durante tu visita a Atenas te apetece tener una tarde de sol y playa lo tienes muy fácil. Estás en la capital europea con playas más próximas. Basta con que cojas un taxi o un tranvía desde Syntagma que en unos minutos estarás en la Riviera ateniense o Costa de Apolo, una zona de costa de 60 kilómetros hasta el cabo Sunion donde hallarás varias calas para bañarte.
La más próxima es Glyfada, que da nombre a un elitista barrio de la capital. Ten en cuenta que, en esta zona, las mejores playas son privadas, así que si quieres disfrutar de sus ventajas –además de la limpieza, están equipadas con tumbonas, sombrillas y otras comodidades- tendrás que pasar por caja. La más exclusiva es la playa de Astir, con deportes acuáticos, tiendas y restaurantes. Aunque si no quieres rascarte el bolsillo, también hay playas gratuitas en Palio Faliro (Edem), Kavouri y Glyfada, así como en Shinias, Maratón y Vravrona, al norte, aunque más alejadas.
Si quieres vivir una experiencia diferente, puedes acercarte a Limni Vouliagmenis, un lago con parte de agua salada y otra de manantial, con una temperatura que nunca baja de 20 grados centígrados –así que es una buena opción si visitas Atenas en invierno- y que es famoso por sus cualidades terapéuticas. Está junto a un acantilado de espléndidas vistas.
¿Estás visitando Creta en familia? ¿Quieres un plan apasionante para todos? Se llama Cretaquarium y está construido en una antigua base aérea estadounidense situada en Gournes, a 15 kilómetros al este de Heraklion. Prepárate para adentrarte en el mundo submarino porque las impresionantes instalaciones cuentan con 60 tanques de gran tamaño para albergar a unos 2500 ejemplares de especies mediterráneas y tropicales.
Y por si fuera poco, podrás disfrutar de instalaciones interactivas y multimedia e incluso una aplicación con personajes para que los más pequeños descubran los entresijos del mundo submarino. Si te interesa profundizar en la información, puedes contratar un tour guiado o escuchar las explicaciones con unos cascos. Además, échale un ojo al calendario de actividades porque casi siempre hay alguna para educar a los más pequeños en el respeto y conocimiento de los mares. Para llegar, lo mejor es que cojas el autobús que sale cada media hora de la estación A de Heraklion, que te dejará a apenas diez minutos de la entrada.
¿Te apetece un día de sol y playa en Santorini? ¡Pues sólo tienes que elegir una playa y disfrutar! Vas a acertar con total seguridad, porque además de pueblos encantadores y paisajes volcánicos sublimes, Santorini también te ofrece unas excelentes playas. Ten en cuenta que las mejores están en las costas este y sur. Una de las más famosas es Perissa, aunque precisamente por eso suele estar a tope en verano.
Si buscas algo más de tranquilidad, mejor vete un poco más al sur y busca las de Perivolos, Agios Georgios y Viyhada. Otra buena opción es la Playa Roja, cerca de la antigua Akrotiri, que recibe este nombre porque está rodeada de acantilados de color rojizo. El paisaje es precioso y las aguas, cristalinas aunque debes saber que la playa es de cantos rodados. Otra de las playas más conocidas de la isla es la de Kamari, un pueblo vacacional a sólo diez kilómetros de Fira, la capital. Allí encontrarás una larga franja de arena negra regala un paisaje excelente y un lugar fantástico donde bañarse. Además, la carretera que bordea la playa está llena de restaurantes y bares, muy animados en verano. ¡Qué más puedes pedir! Al norte de Monolithos hay otras playas menos vistosas y menos concurridas. Finalmente, en la costa norte, tienes varias playas interesantes como Paradise o Pori cerca de la bellísima Oia.
¡No te olvides la toalla cuando vayas a la playa! La mítica canción estival de los ochenta te servirá para recordar que es aconsejable que tengas toalla, esterilla o tumbona para ir a la playa en Santorini porque la arena oscura que caracteriza a muchas de sus playas absorbe mucho el calor que es difícil caminar o tumbarse encima de ella.
Descubre el itinerario
- Alojamiento
- Atenas
- Desayuno.
- Atenas
- Acrópolis con entrada
- Panorámica de Atenas
- Desayuno. Almuerzo. Cena.
- Mykonos
- Crucero por el Egeo
- Desayuno. Almuerzo. Cena.
- Kusadasi
- Patmos
- Visita a Éfeso
- Desayuno. Almuerzo. Cena.
- Heraclión
- Santorini
- Palacio de Knossos
- Desayuno
- Atenas
- Atenas
Conoce un poco más de Grecia
Uno de los grandes placeres para el viajero amante de la gastronomía será comer pescado o marisco fresco en una taberna a orillas del mar. Basta con escoger el lugar, preguntar al camarero y acompañarlo a la cocina para que te explique qué ha llegado hoy desde el puerto. Y para acompañar, nada mejor que una ensalada griega, con tomates que saben a tomates, pepinos que saben a pepinos y un queso feta para chuparse los dedos. Es habitual que encontremos la opción de consumir varios entrantes –mezédhes- y luego pedir los segundos por peso, no por raciones, porque en Grecia es típico pedir comida para compartir entre toda la mesa. La cocina griega es claramente mediterránea y está basada en los productos de temporada. Entre la carne destaca el cerdo, el cordero y el cabrito, y entre las verduras la berenjena, cuyo cocinado es un arte en Grecia. No hay que perderse el aceite de oliva, el vino y el licor nacional, el ouzo.
Los viajeros amantes de las compras se lo van a pasar bien en Grecia porque el país heleno ofrece una enorme variedad de opciones para desgastar la tarjeta de crédito. En Atenas, además de mercados tradicionales y tiendas de recuerdos, encontrarás tiendas de moda, joyerías y otros tipos de comercios elegantes. Y por todo el país hay artesanía muy variada para escoger. Destaca el trabajo del cuero, como las sandalias, los bolsos o los cinturones. La plata loánina también posee una larga tradición y es un excelente recuerdo. Y para los amantes de los souvenirs gastronómicos, nada mejor que el aceite de oliva, el ouzo, la retsina –vino tradicional con un sabor resinoso-, la miel o las especias.
• 1 de enero: Año Nuevo.
• 6 de enero: Epifanía.
• Miércoles de ceniza: 41 días antes de Semana Santa.
• 25 de marzo: Día de la Independencia.
• Desde el Viernes Santo hasta el Lunes Santo
• 1 de mayo: Día del Trabajo
• Pentecostés: 50 días después de Semana Santa.
• 15 de agosto: Asunción de Nuestra Señora
• 28 de octubre: Celebración Nacional.
• 25 de diciembre: Navidad
• 26 de diciembre
Los cajeros automáticos se encuentran sin problemas por todos los países y aceptan tarjetas de crédito de uso más común (Visa, MasterCard, Maestro, Cirrus, American Express, etc.). También en la mayoría de los establecimientos, restaurantes y hoteles suelen permitir el pago con tarjetas de crédito y débito. En zonas rurales o enclaves especialmente pequeños, es aconsejable disponer de dinero en efectivo. Recuerde que para alquilar un coche se necesita presentar siempre una tarjeta de crédito en vigor.
Para evitar problemas desagradables, lo mejor es apuntar en un papel o en el móvil los teléfonos de las entidades emisoras de tus tarjetas de crédito. Así, si se da el caso de que pierdas o te roben alguna, podrás llamar inmediatamente a tu banco y pedir que la bloqueen.
Tasas
A partir del 1 de enero de 2018, el gobierno griego impondrá una tasa de alojamiento por persona y día que debe ser abonada por los clientes directamente en los hoteles.Divisas
Rige la normativa de la Unión Europea, es decir, es obligatorio hacer una declaración si se entra en Grecia con 10.000 euros o más.