Las experiencias en cada puerto van a ser inolvidables. Y es que además de disfrutar de las actividades y comodidades que te ofrece el crucero y su tripulación durante los días de navegación, las paradas en los puertos más interesantes van a ser parte de la aventura. Ciudades monumentales, repletas de vida y patrimonio te darán la bienvenida.
Construido en el siglo XVI, el Forte Michelangelo es una fortaleza de estilo renacentista en forma de cuadrilátero que protegía y defendía el puerto. Asimismo, esta edificación situada frente al mar, posee imponentes estructuras y cuatro torres angulares. La torre principal fue diseñada por Michelangelo Buonarroti, de ahí el nombre del fuerte.
Civitavecchia es uno de los puertos de la capital italiana, Roma. Así que uno de los rincones imprescindibles es el Coliseo, un gigantesco anfiteatro que tenía capacidad para 65.000 espectadores. Data del siglo I y se trata del anfiteatro más grande que se construyó durante la época del Imperio romano. Asimismo, en él tenían lugar luchas de gladiadores y espectáculos públicos.
Una de las joyas más preciadas de Roma es la Fontana di Trevi. Se trata de una monumental fuente de estilo barroco situada frente al palacio Poli cuya fachada tiene un impresionante orden de corintias con dos tritones que guían la carroza. Y es que esta fuente es un rincón que enamora y seduce con gran facilidad.
La basílica papal de San Pedro es un imponente y majestuoso templo católico situado en la Ciudad del Vaticano. Posee unas dimensiones impresionantes, tal y como demuestran sus 193 metros de longitud y sus 45 metros de altura. Por otra parte, su estilo arquitectónico es renacentista y barroco, destacando su gigantesca cúpula. Además, según el catolicismo, está situada sobre el lugar de entierro del apóstol San Pedro.