Esta encantadora casa de huéspedes combina el diseño de interiores moderno con elementos tradicionales. Consta de un total de 8 habitaciones y es un ejemplo inmejorable de la hospitalidad marroquí. Tras un día de turismo y exploración, los huéspedes podrán tomar el sol en la amplia terraza y disfrutar de un té de menta refrescante o una suntuosa comida auténticamente marroquí, para después darse un chapuzón en la piscina: aquí la vida es puro placer. Entre sus instalaciones a disposición de los huéspedes cuenta con vestíbulo con recepción 24 horas, sala de TV y restaurante. Los huéspedes tienen su disposición el servicio de habitaciones y de lavandería y el establecimiento cuenta con aparcamiento para los que lleguen en coche.
Esta casa de huéspedes está situada en el centro de la medina, a 10 minutos a pie de la plaza de Jemaa El Fna. Se encuentra muy cerca del museo de arte marroquí Dar Si Said, a 300 m de la parada de taxis y a solo 5 minutos del Palais Bahia. Los huéspedes encontrarán locales para salir por la noche y bares a 15-20 minutos en coche y la estación de trenes a 15 minutos de viaje. El valle de Ourika se encuentra a 90 minutos en coche; Oukaimden, a 2 horas; la playa de Essaouira, a 2,5 horas; y Casablanca, a 3 horas en coche. El aeropuerto internacional de Menara está a solo 9 km (20 minutos).
Todas las habitaciones son un oasis de confort, diseñadas para ofrecer el máximo placer y decoradas con colores cálidos. Todas tienen cuarto de baño privado con ducha (una suite tiene también bañera), secador de pelo y cama extra grande. Están equipadas con conexión a Internet, un teléfono móvil gratuito que los huéspedes pueden utilizar en Marrakech (solo llamadas locales), caja fuerte y minibar. Además, disponen de cafetera/tetera, aire acondicionado y calefacción regulables, así como de terraza. Hay 2 reproductores de DVD portátiles a disposición de los huéspedes durante su estancia.
El almuerzo y la cena pueden disfrutarse a la carta.
El hotel acepta American Express, MasterCard y VISA.
La gente procedente de países o religión musulmana necesitan presentar un certificado de matrimonio para compartir una habitación doble.