Este apartotel ofrece una cálida bienvenida, un ambiente agradable y unas instalaciones prácticas para que su estancia en París sea memorable. Comprende un total de 49 lujosos apartamentos repartidos en 6 plantas, accesibles directamente a través de un precioso jardín. Entre las instalaciones se incluye vestíbulo, caja fuerte y sala de desayunos. Además, por un suplemento, podrá hacer uso del servicio de lavandería y del aparcamiento.
Este hotel está situado a mitad de camino entre el Sena y la estación Place d'Italie, cerca de la estación de París Austerlitz y del hospital Pitié-Salpêtrière. Está situado en una bulliciosa área tradicional francesa que tiene de todo; amplias avenidas arboladas, pequeñas plazas y viejas terrazas de cafeterías. El Barrio Latino y el estadio de Bercy no quedan lejos. La parada de autobús más cercana está a solo 5 minutos de camino, lo mismo que las tiendas, y el Jardín de las Plantas queda a 17 minutos andando. El aeropuerto de Orly está a 13 km y el aeropuerto Charles de Gaulle, a 31 km.
Los alojamientos están muy bien equipados con comodidades modernas para que su estancia sea lo más confortable posible, incluyendo cocina completa con nevera, microondas, lavadora y set de plancha, y cuarto de baño particular con ducha o bañera. Además, cuentan con teléfono de línea directa (de pago), TV, conexión a Internet, equipo de música, calefacción regulable y caja fuerte.
Podrá empezar el día con un desayuno delicioso servido en el cálido y agradable entorno de la sala de desayunos.
Se aceptan American Express, Diners Club, JCB, MasterCard y VISA.
En su centro se alza la colonne de Juillet, coronada por el famoso Génie de la Liberté, que conmemora la revolución de 1830. Pero la plaza es muy conocida por otra revolución: la de 1789. En esta época, el lugar estaba ocupado por la prisión de la Bastille, símbolo del poder absoluto del Ancien Régime. De esta prisión, destruida después de la Revolución Francesa, no queda nada. Hoy en día, la plaza sirve de marco para grandes eventos populares – conciertos, ferias, marchas ciudadanas – y de punto de encuentro ineludible para los noctámbulos que frecuentan los bares y restaurantes de los alrededores, sobre todo los de la rue de la Roquette.