El establecimiento abrió sus puertas a principios del siglo XX. Se trata de uno de esos hoteles parisinos con encanto y personalidad que combinan tradición francesa con un enfoque contemporáneo, como corresponde a la reputación de París. Fue renovado por completo en 2006 utilizando materiales cálidos y nobles y mezclando armoniosamente lo íntimo con lo práctico y lo bello con lo moderno para estar a la altura tanto de la clientela de negocios como de los turistas ansiosos por visitar París. Este atractivo hotel urbano tiene 40 habitaciones en total, además de instalaciones como aire acondicionado, vestíbulo con servicio de salida y recepción 24 horas, caja fuerte, ascensor, salón de TV, sala de desayunos y conexión a Internet/WiFi con cargo extra.
El hotel se encuentra en el corazón de la zona de Daumesnil, muy cerca del Viaduc des Arts, uno de los lugares más fascinantes de París. El histórico Marais, la Bastilla (el centro de la moda y la vida nocturna de París), el distrito de negocios de Bercy y la Gare de Lyon están también cerca. Notre Dame se encuentra a unos 30 minutos a pie, la Torre Eiffel a unos 13 minutos en transporte público y los aeropuertos internacionales Charles de Gaulle y Orly distan ambos unos 25 km del hotel.
Cada una de las 40 habitaciones del hotel tiene un toque personal y el delicado encanto de una atmósfera acogedora. La decoración está basada en una temática específica, compuesta de originalidad, elegancia y refinamiento. Un diseñador francés ha decorado todas las habitaciones con gusto, manteniendo con habilidad el encanto de la tradición francesa y añadiendo un moderno confort y tecnología. Para asegurarle un buen descanso nocturno, las habitaciones están equipadas con los más modernos aparatos de aire acondicionado, que le permitirán ajustar la temperatura a su gusto. Además, disponen de cómodas camas dobles, bañera o ducha con termostato, secador de pelo, teléfono con servicio de contestador, TV LCD vía satélite/por cable, conexión gratuita inalámbrica de alta velocidad a Internet (WiFi), minibar refrigerado y caja fuerte personal para garantizarle seguridad.
El hotel acepta American Express, Diners Club, JCB, Mastercard y Visa.
Se sirve a diario desayuno continental en forma de bufet.
En su centro se alza la colonne de Juillet, coronada por el famoso Génie de la Liberté, que conmemora la revolución de 1830. Pero la plaza es muy conocida por otra revolución: la de 1789. En esta época, el lugar estaba ocupado por la prisión de la Bastille, símbolo del poder absoluto del Ancien Régime. De esta prisión, destruida después de la Revolución Francesa, no queda nada. Hoy en día, la plaza sirve de marco para grandes eventos populares – conciertos, ferias, marchas ciudadanas – y de punto de encuentro ineludible para los noctámbulos que frecuentan los bares y restaurantes de los alrededores, sobre todo los de la rue de la Roquette.