Este hotel está ubicado en la isla de Hvar, en la pequeña y pintoresca localidad de Jelsa, en una colina arbolada, pendiente de la línea de costa, con lavanda y grandes campos de romero en la propiedad vecina. La propiedad tiene un hermoso jardín de olivares, piscina cubierta recientemente renovada y una pequeña piscina al aire libre con un bonito solárium. El centro de Jelsa se encuentra a sólo un paseo. Cerca del hotel se encuentran dos zonas de playa, una de las cuales es ideal para los niños. Hotel Hvar ofrece una amplia gama de instalaciones deportivas como pistas de tenis, alquiler de bicicletas y una sala de fitness.
Jelsa está ubicada en medio de la isla, rodeada de bellos pinares, lavanda, viñedos, olivos, un mar transparente y del azul del cielo. El clima se caracteriza por vientos suaves y veranos cálidos con muchas horas de sol. La isla en sí, tiene más de 140 años de tradición, desde que el turismo empezó oficialmente en 1868, aunque ya se practicaba antiguamente en la época romana- el hotel más antiguo en Jelsa data de 1911. Hoy en día, la isla de Hvar es un destino popular entre los turistas, considerada entre las 10 primeras islas en la lista de la revista Conde Nast Traveler. Jelsa y sus numerosas iglesias, plazas, parques, cuevas y sitios históricos son lugares dignos para explorar. Los sitios más interesantes para visitar son: Las cuevas de Humac y GrepÄe, el casco histórico de Jelsa (Civitas Vetus Ielsae) y la torre Tor.
La mayoría de las habitaciones tienen balcón o terraza, ofreciendo una maravillosa vista del Mar Adriático, la isla de Brac y de la Riviera de Makarska.
El Hotel Hvar ofrece una amplia gama de instalaciones deportivas, como pistas de tenis, bicicletas de alquiler y un gimnasio.