Este hotel renovado en el 2006 cuenta con 253 habitaciones modernas, espaciosas y climatizadas, así como con 2 suites y varias salas de reuniones. En la cafetería se sirve comida las 24 h. También dispone de área de recepción con servicio 24 horas, ascensor y aparcamiento al aire libre de pago.
El hotel se encuentra justo al lado de la estación de trenes Gare de Lyon, a 10 minutos a pie de la histórica Bastilla y la animada zona de bares y restaurantes a su alrededor. Además, está a 10 minutos en metro del Louvre y cerca de las principales tiendas. Tampoco queda lejos del centro de eventos Palais Omnisports de Bercy, la estación de Austerlitz y la Biblioteca Nacional Francesa. El aeropuerto de Orly dista 15 km, mientras que el de Roissy Charles de Gaulle está a 28 km.
Las habitaciones, para fumadores y para no fumadores, tienen 25 m² y cuentan con un diseño innovador y un esquema de colores claros combinados para ofrecer un ambiente relajado. Están dotadas de cama grande, cuarto de baño con ducha y bañera por separado, caja fuerte, minibar, TV con canales satélite, conexión a Internet inalámbrica, teléfono de línea directa, secador de pelo, radio, equipo de música, cafetera/tetera y climatizador regulable.
El registro y salida se llevan a cabo a las 12 del mediodía. La cafetería abre desde las 18:00 hasta medianoche. El bufet de desayuno está abierto de 6:00 a 9:00 horas entre semana y de 7:00 a 10:30 los fines de semana.
Durante todo el día podrá visitar el Novotel Café para descubrir su sencilla y exquisita cocina. Si lo prefiere, también podrá tomar un cóctel en el moderno bar.
Se aceptan American Express, Diners Club, JCB, MasterCard y VISA.
En su centro se alza la colonne de Juillet, coronada por el famoso Génie de la Liberté, que conmemora la revolución de 1830. Pero la plaza es muy conocida por otra revolución: la de 1789. En esta época, el lugar estaba ocupado por la prisión de la Bastille, símbolo del poder absoluto del Ancien Régime. De esta prisión, destruida después de la Revolución Francesa, no queda nada. Hoy en día, la plaza sirve de marco para grandes eventos populares – conciertos, ferias, marchas ciudadanas – y de punto de encuentro ineludible para los noctámbulos que frecuentan los bares y restaurantes de los alrededores, sobre todo los de la rue de la Roquette.