Dispone de todas las comodidades de negocios, un gimnasio con sauna, una cafetería y bar del hotel. Los viajeros que lleguen en coche pueden hacer uso de estacionamiento y servicio de valet. La recepción está abierta 24/7 y ofrece servicio de conserjería para su conveniencia. Se acepan mascotas.
El hotel en Renngasse está situado en el centro urbano de Viena, a pocos pasos de la antigua Bolsa de Valores, el edificio principal histórico de la Universidad de Viena, la Iglesia Votiva y el Sigmund Freud House. El centro de la ciudad se puede llegar igual de bien, por lo que incluso un viaje de negocios puede prever un poco de turismo por el camino.
Dispone de espaciosas suites y apartamentos disponen de salas de estar y dormitorios independientes. Todas las habitaciones están equipadas con una opción de una cama king size o dos camas individuales. El salón ofrece varios servicios que incluyen un amplio escritorio, internet WiFi y está amueblado con un cómodo sofá, un bar, un mini bar nevera grande y un horno microondas. Además, todas las suites cuentan con dos televisores, TV vía satélite y red SKY TV gratis. Cada suite tiene su propio conjunto de controles de clima y calefacción para su comodidad y confort. Dispone de apartamentos para no fumadores. Se acepan mascotas.
Disfrute de platos tradicionales vieneses, salados goulash, o de la cocina internacional. Los Restaurantes de Viena tienen mucho que ofrecer. O visite una de las tabernas Heurigen y disfrutar de una agradable velada en las inmediaciones.
El Café Central es una conocida cafetería de la ciudad de Viena. Se encuentra en el distrito número 1 de la capital austriaca, en el 14 de la calle Herrengasse, un edificio neorrenacentista que en la actualidad recibe el nombre de Palais Ferstel en honor a su arquitecto, Heinrich von Ferstel. El café abrió sus puertas en 1860. A finales del siglo XIX se convirtió en uno de los puntos de encuentro más importantes de la intelectualidad vienesa, en parte gracias al cierre y derribo del Café Griensteidl. Algunos de los clientes habituales del Central fueron, entre otros, Peter Altenberg, Egon Friedell, Hugo von Hofmannsthal, Anton Kuh, Alfred Adler, Sigmund Freud, Adolf Loos (quien diseñó el interior del Café Museum), Leo Perutz y Alfred Polgar. Hasta 1938, el Café Central recibía también el nombre jocoso de universidad del ajedrez, pues era frecuentado por muchos aficionados a este juego.