Este hotel de lujo de seis plantas es uno de los mejores de toda la ciudad y destaca, sobre todo, por su magnífico servicio, su tradicional elegancia y por su individual atmósfera. Cuenta con un total de 269 habitaciones, 39 de ellas suites. Parte de las instalaciones son un acogedor vestíbulo, un salón, un bar, los dos restaurantes, Loui y Café Wiltcher's, donde se le servirán tanto platos euroasiáticos como internacionales, y una gran cantidad de salas, como la enorme sala de baile, en las que podrá celebrar eventos, reuniones y banquetes. Podrá aparcar su vehículo en el garaje del propio hotel (bajo cargo adicional).
Este hotel está situado en la famosa avenida Louise, la conocida calle comercial y de negocios de Bruselas. A unos minutos andando podrá llegar sin ningún problema a la estación central, a numerosos lugares de interés turístico y a elegantes tiendas y comercios. También podrá llegar fácilmente al aeropuerto de Bruselas desde el hotel, ya sea con el taxi o con el servicio de transporte público (parada a 500 metros).
Las modernas habitaciones, equipadas para ofrecerle el máximo confort, disponen de baño con secador de pelo, teléfono de línea directa, minibar-nevera y caja fuerte de alquiler. Las habitaciones deluxe (alrededor de 42 m²) tienen baño y una ducha aparte, albornoces y televisión vía satélite y por cable. Las elegantes habitaciones de categoría superior están situadas en el tranquilo patio interior y están dotadas de balcón. Las preciosas suites junior (de unos 65 m²) tienen, además, un salón-comedor de dos plantas.
Todas las mañanas se ofrece desayuno en forma de bufet.
La Avenue Louise y el Boulevard de Waterloo son dos importantes arterias de este barrio, en el que se dan cita el lujo, la moda y los grandes hoteles. Es el equivalente a los Campos Elíseos en París o la Quinta Avenida en Nueva York. También se encuentran los edificios más elegantes de la ciudad. Al final de la Avenue Louise, adentrándose en las Galerías de la Toison d'Or y Louise, encontramos el reino de la moda más vanguardista y trendy. Este barrio de gran elegancia se completa con el Boulevard Waterloo, considerado el más chic de la capital, donde además de las tiendas de gran clase y de las galerías más prestigiosas no faltan los mejores restaurantes de moda y de fama internacional.