Este hotel restaurado, tiene 6 plantas y un total de 41 habitaciones, 5 de ellas suites. Dispone de un hall de entrada con ascensores y de un área de recepción abierta las 24 horas del día, que le ofrece caja fuerte y tresillo. Además, también cuenta con una terminal de Internet y un sótano para guardar bicicletas. Como prestaciones adicionales, se le ofrece servicio de lavandería.
Este bonito hotel urbano está situado en una zona céntrica, rodeado de palacios de los siglos XVII y XVIII. A tan sólo 100 metros encontrará una gran cantidad de bares y restaurantes, así como una parada de transporte público y la Place des Vosges. El museo del Louvre está situado a unos 2 kilómetros y la catedral de Notre Dame a 1,5 aproximadamente. El aeropuerto de Orly y de Charles de Gaulle se encuentran a 15 y 25 kilómetros, respectivamente.
Las habitaciones, decoradas y amuebladas con buen gusto, disponen de cuarto de baño con ducha, bañera y secador de pelo. Además, están equipadas con teléfono de línea directa, calefacción central, televisión vía satélite o por cable, minibar, cama doble y conexión a Internet.
Todas las mañanas se ofrece desayuno en forma de bufet, para que así pueda servirse lo que quiera.
Se aceptan todas las tarjetas de crédito actuales, como American Express, Master Card, Visa, Diners Club y JCB.
En su centro se alza la colonne de Juillet, coronada por el famoso Génie de la Liberté, que conmemora la revolución de 1830. Pero la plaza es muy conocida por otra revolución: la de 1789. En esta época, el lugar estaba ocupado por la prisión de la Bastille, símbolo del poder absoluto del Ancien Régime. De esta prisión, destruida después de la Revolución Francesa, no queda nada. Hoy en día, la plaza sirve de marco para grandes eventos populares – conciertos, ferias, marchas ciudadanas – y de punto de encuentro ineludible para los noctámbulos que frecuentan los bares y restaurantes de los alrededores, sobre todo los de la rue de la Roquette.