El â¿¿tadtbad Oderberger fue diseñado en 1898 por el arquitecto Ludwig Hoffmann para abastecer al entonces creciente distrito de Prenzlauer Berg con instituciones públicas. En 1986 se vio obligado a cerrar y permaneció así hasta 2012, cuando comenzaron las renovaciones. En enero de 2016, se abrió el Hotel Oderberger Berlin. El área de la piscina se sigue utilizando como lugar para eventos, pero desde el 17 de octubre de 2016, la piscina se vuelve a abrir por primera vez en 30 años.
El Hotel Oderberger Berlin se encuentra en el distrito de Prenzlauer Berg, en la frontera con Berlin Mitte, en Oderberger Strasse.
El hotel dispone de 70 habitaciones y 2 apartamentos.
El bar de cócteles se encuentra en la planta baja del Hotel Oderberger. Explore la amplia selección de vinos y licores cuidadosamente seleccionados de todo Berlín y Alemania, todos los días a partir de las 5 p.m.
La histórica sala de natación cubierta es la joya del hotel. La piscina tiene 20 m de largo y 1.35 m de profundidad y se conecta a la sauna. El horario de apertura está sujeto a disponibilidad y se publica con 2 semanas de anticipación. Algunos días se celebran eventos especiales en la sala y la piscina y la sauna permanecen cerradas, consulte con recepción. Los huéspedes del hotel pagan un precio especial por la piscina y la sauna directamente en el establecimiento.
El restaurante está ubicado en la antigua estación de energía térmica épica de los baños históricos de la ciudad en Oderberger Strasse. Su diseño industrial-chic se distribuye en tres niveles con techos altos para un ambiente de comedor óptimo.
El Muro de Berlín fue un muro de seguridad que formó parte de la frontera interalemana desde el 13 de agosto de 1961 hasta el 9 de noviembre de 1989 que separó la zona de la ciudad berlinesa encuadrada en el espacio económico de la República Federal de Alemania, Berlín Oeste, de la capital de la RDA entre esos años. Este muro está denominado como Muro de Protección Antifascista. Sirvió para impedir la emigración masiva que marcó a la Alemania del Este y al bloque comunista tras la creación de las dos Alemanias. Un muro de 45 kilómetros dividía la ciudad de Berlín en dos, mientras que otros 115 kilómetros rodeaban su parte oeste aislándola de la República Democrática Alemana.